AMNESIA
Al abrir el contenedor, se dio cuenta de que estaba
empezando a olvidar el nombre de las cosas. ¿Cómo diablos se llamaba el objeto
que refulgía entre la basura? Era un nombre común, precisamente llevaba uno
puesto sobre su rostro, apoyado con dos pequeñas pestañas sobre la nariz, a
través del cual contemplaban el mundo sus ojos cansados. Un escalofrío sacudió
al anciano. Alarmaba comprobar como la memoria se resquebraja. Y era paradójico
que el viejo se sintiera asustado, pues había reconstruido su vida sobre una
amnesia deliberada. ¿Cómo se llamaba aquella cosa? Y recordó que había
confiscado miles de ellas a las personas que descendían de los trenes, antes de
ordenar que se desnudaran, en Dachau.
(Texto que quedó ganador del III Certamen de Microrrelatos de Historia "Francisco de Gijón". 2015)
No hay comentarios:
Publicar un comentario